Personitas leyendo mí cabeza

lunes, 16 de abril de 2012

Yo sí te necesito

Pensar que algún día no estará una persona que quieres, deprime. Pues, ¿Cómo sería saberlo? Saber que en una semana, un día, un instante, ya no esté. Pensar en las conversaciones, en las palabras, en las mentiras... Aunque, en este caso me gustaría que la verdad, fuera la mentira. Las sonrisas, los gestos... Todo. Pensar que algún día se podría acabar es un asco; pero saberlo, saber que puede que un día todo desaparezca, que el suelo bajo mis pies se desmorone, eso... No hay palabras para describir lo que se siente. Deduciréis que agradable no es, pues es muchísimo peor. Pensad en vuestr@ mejor amig@, en vuestra/o novio/a, en ese chico que os robó el corazón, en esa chica que solo te produce suspiros... Ahora pensad en que un día, un accidente, una enfermedad, un "no volverá jamás", un "hasta nunca", un "adiós". Una cosa es imaginarlo... Pues pensad en lo que sentiríais si supierais, que un día, no esté, todo se haya esfumado, que ese "adiós", fuera para siempre; tenerle miedo a los días, a los minutos, a los segundos, a todo; porque, puede que mañana, a esta hora, en este instante, en ese pestañeo, en esa sonrisa momentánea, te gires, y estés sola, que ya no esté... Ya no me podría hacer reír, no me hará suspirar, tampoco enfadar, ni siquiera sonreír al acordarme de todo. Ponerle fin a una etapa, a un cuento, a un libro, cuesta, entristece; pero lo que verdaderamente duele, destroza, es ponerle fin a una vida, que hacía de la tuya, una historia para recordar, supuestamente, sin final. Mucha gente piensa (incluida yo), que si un día nos vamos o nos morimos, a nadie le importará. Pues, ahora, yo soy la que está al otro lado, la que se queda en silencio en una esquina, la amiga que siempre ha estado ahí, sin fallarte ni una sola vez, aquella niña a la que enamoraste fácilmente, aquel chico que te regalo un instante de felicidad, y en ese instante, él lo fue toda la vida. Ahora, que estoy al otro lado, soy todos aquellos, los que se quedan en silencio, pero siempre permanecen ahí, a tú lado, en tú vida. Soy todos aquellos, a los que quieren que la historia de su vida, no tenga final, con vosotros como personajes principales. 

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