“Hace frio, y el
viento persistente revolotea mi pelo enredándolo, mis manos nerviosas tiemblan
levemente. La luna en lo alto, y alguna estrella lejana es lo único que da un
poco de luz a esta oscuridad amarga. Mis amigas bromean sobre algo, no consigo
prestarles atención, te estoy buscando ¿sabes? Tú ya sé que no. Los ojos me
brillan, culpa del aire, o del frio, o de ti, o de que ya no me quieras, o de
saber que nunca ha sido así. Y sigo mirando entre la gente, caras desconocidas
que se encuentran con mi vista perdida. Y tengo miedo de encontrarte, y temo no
verte. No sé que es peor si no verte me parte el corazón, y verte me parte a mí
en dos.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario