Personitas leyendo mí cabeza

martes, 1 de abril de 2014

Ya no.

Y no, no hay versos ni besos para ti. No hay abrazos y esperas, no hay lágrimas, sueños o premoniciones. A ti no te veo, a ti no te quiero, tú no estás en mi libreta ni en mi almohada, es más, me alegra que hayas escapado, que te hayas perdido de mi vida. Que me hayas dejado aquella tarde con las manos vacías. Contigo no tengo prisa de nada. Eres la manera que tiene el universo de decirme que todo es posible, incluso, que los muertos revivan como es tu caso. Tú no estás en mis letras, a ti no te rodea mi magia, no tocas mi corazón, no erizas mi alma. A ti no te dejo entrar, a penas te abro una rendija bajo la puerta para que te asomes y descubras un mundo en el que no vives, porque una vez estuviste dentro y corriste, huiste sin mirar atrás. Hoy no estas, hoy sólo espías, hurgas, miras lo que no quisiste y hoy… hoy no te lo voy a dar.

– Posesión Maligna No. 16, Mercedes Reyes Arteaga.


No hay comentarios:

Publicar un comentario