Personitas leyendo mí cabeza

viernes, 22 de enero de 2016

Vivirte.

Miro tu boca como un abismo al que no tengo que tirarme, si no subirlo escalando. Siento decirte que he dejado a un lado mis tendencias suicidas, que ahora sólo quiero vivirte, vivirnos, vivir contigo una y mil veces, una y mil vidas.
Subo hacia tu boca, de puntillas, alzando los brazos para rodearte la nuca, y te atraigo, y te apreso, y te lamo el cuello, y espero a que bajes la cabeza para darme un beso.
Y qué bonito tu precipicio, y qué vértigo.
Acercas tu boca a la mía, anticipando mi llegada a la cima, y tu lengua me sabe a un agosto que no termina, a noche de fin de año con sábanas blancas y barra libre de poesía. 
Tu saliva lo cambia todo. Y para bien. Y tú me has cambiado la vida. Para mejor. 
Porque contigo ya no tengo miedo a caer,
  porque contigo solo puedo llegar más y más alto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario